¿Te apetece experimentar con la caligrafía y el lettering? Antes de empezar a poner la tinta sobre el papel, puede que te interesen estos consejos que hemos ido recopilando a base de experiencia. Porque hay cosas que no parecen importantes, pero lo son.
Podríamos haber titulado este post Lo que nadie te explica cuando comienzas a escribir, pero no sería cierto, porque sí te lo explican cuando realmente te adentras en este apasionante mundo de la mano de profesionales. Pero cuando te pica el gusanillo de las letras, lo más normal es lanzarte a comprar materiales como rotuladores, plumillas, tintas... Miras algunos tutoriales por Internet, te descargas algunos alfabetos... y te pones a practicar. Aunque nosotras siempre hemos recomendado hacer cursos (buenos cursos, con mucho cuidado al elegir como ya os contamos AQUÍ), tampoco desmerecemos la vía autodidacta.
Pero no podemos correr antes de andar. Y las ganas suelen hacer que empecemos a probar con la caligrafía (o el lettering) sin tener en cuenta algunos básicos.
* La mesa: No tod@s tenemos un escritorio de calígrafo o de artista gráfico, pero es imprescindible contar con una buena superficie para escribir bien. Mi primera mesa era muy mona, pero demasiado estrecha y no me dejaba mover el brazo con comodidad.
Dicen los expertos que la mesa debe tener una anchura de entre sesenta y sesenta y cinco centímetros, "distancia que aproximadamente viene a ser la del codo del que escribe hasta las extremidades de los dedos, más la mitad". La distancia de delante a atrás "no debe ser menor de medio metro; pues aunque realmente no se necesita esta longitud para escribir, es conveniente, a fin de que puedan colocarse sobre la mesa el tintero y otros objetos precisos para dicho ejercicio" (Arte de la Escritura y de la Caligrafía. Teoría y práctica, Rufino Blanco, 1902).
Sobre la inclinación, no puedo reprimirme y tengo que reproducir otro fragmento de esta obra: "La bella escritura se produce lo mismo en un plano horizontal que en uno algo inclinado: la mayor facilidad que algunas personas tienen para escribir de una manera o de otra es solamente efecto de la costumbre. Por esta razón el uso de mesas con tablero en forma de pupitre se recomienda solamente para evitar que los rayos de luz reflejados sobre el papel vaya a parar a los ojos".
Mi mesa ahora es lo suficientemente amplia :) Y eso se nota al escribir, creedme. Si no tenéis otro remedio que practicar vuestra afición en la mesa del comedor o la cocina, despejadla bien.
* La iluminación: La luz es básica para poder practicar la caligrafía con comodidad. Siempre que podamos, escribir con luz natural (que no deslumbre y desde el ángulo adecuado) es lo mejor. Aunque muchas veces tendremos que recurrir a la artificial. No sé si se aprecia bien en la anterior foto, pero los ojos agradecen una buena iluminación cenital que ilumine toda el área de escritura y evite sombras. Para mí fue un antes y un después añadir un fluorescente led sobre mi escritorio. Lo coloqué bajo una estantería.
El fluorescente (1) añade luz al flexo (2), también led y con lupa, y a la inestimable luz que entra por la ventana (3), desde la izquierda, que soy diestra.
* El papel: No es necesario malgastar blocs de papeles caros para practicar, sobre todo al principio. Aunque hay que tener claro que un mal papel puede hacer que la plumilla de caligrafía se enganche y sea imposible escribir con fluidez o fastidiarnos un rotulador de los caros (con la rabia que da!). La de Tombow dual que me he cargado por usarlos en cualquier folio o en sobres de cartas!
Para el lettering es básico un papel suave al tacto. Recomiendan marcas como Rhodia o Canson. Aunque para practicar algunos cuadernos normales valen. Por ejemplo los Oxford (que tampoco son baratos). ¿Nuestro consejo? Tocad el papel. Si es suave, mejor para vuestros rotus.
* Las guías: Sabemos la pereza que da dibujar una pauta cada vez que cambiamos de estilo de letra, de tamaño de plumilla plana... pero las guías son básicas para escribir. Además hay webs que nos facilitan la tarea. Recopilamos algunas en este POST.
* El palillero: Ya os lo hemos comentado alguna vez. En el mercado hay muchos palilleros, rectos, oblícuos, simples, adornados... muchos, de muchos materiales y de muchos precios. En el caso de los palilleros oblícuos para caligrafía cursiva, vale la pena invertir en uno con la brida de latón. Permite que la plumilla sea flexible (en el grado en qué ésta lo sea, claro). La escritura es mucho más fluida que con un palillero de plástico.
* La tinta: Para empezar a practicar, no merece la pena gastarse mucho dinero. Está bien tener alguna buena para los "trabajos finales", piezas que queramos regalar o que simplemente sean especiales por lo que sea. Para practicar, la mejor opción es la nogalina. Os lo explicamos en esta entrada sobre CALIGRAFÍA LOW COST.
Una vez con estos conceptos claros, llega el momento de ponerse manos a la obra. Tenéis más información sobre algunas plumillas AQUÍ y AQUÍ.
Un paso más allá, los EXTRAS IMPRESCINDIBLES.
Y si lo vuestro es el lettering y os apetece conocer un poco más algunos de los rotuladores, podéis hacerlo en este POST.
No podemos olvidarnos del elemento más necesario para la caligrafía y el lettering: la paciencia. Los avances no son rápidos, pero llegan. Así que a seguir practicando!
No hay comentarios:
Publicar un comentario